Yvette Sánchez y
Roland Spiller, eds. Poéticas
Los relatos de fracaso abundan en las letras
hispánicas de las
últimas décadas. Pero éste no es un
fenómeno
literario nuevo en la producción cultural en nuestra lengua. En
el caso
latinoamericano en particular, se pueden encontrar ejemplos en las
ficciones de
nuestro continente quizás desde el comienzo mismo de la
presencia
europea en él.
En verdad, tanto en Hispanoamérica como en
España, si se
quiere, la cuestión pasa más por preguntarse cómo
se escribe
sobre este tema en territorios geográficos cruzados por
décadas
de derrotas y frustraciones, de proyectos políticos y sociales
incompletos y de desilusiones varias. ¿Qué consecuencias
provocará
en el terreno discursivo literario y en su estilo la presencia
recurrente de
esta temática? ¿De qué manera las tensiones entre
éxito y fracaso mediarán en la creación cultural
en
general que las letras hispanas producen?
Con estos y otros interrogantes se inicia el libro editado
por Yvette
Sánchez y Roland Spiller que reúne dieciséis
artículos originalmente leídos en el coloquio que, sobre
el mismo
tema, se llevara a cabo en la Universidad
de San Gallen (Suiza), en septiembre de 2007. El texto propone un
acercamiento a la “cultura del fracaso”, entendida como un generador
productivo de nuestro imaginario, como “figura mental
poético-cultural de las letras hispánicas de distintas
épocas del siglo XX” (9). Teniendo en cuenta la escasez de
trabajos
críticos sobre este fenómeno –a excepción de las
publicaciones referidas a los motivos del naufragio y la caída-
se hace
necesario entonces, según sus editores, examinar esta
manifestación
desde una perspectiva que cuestione “el tabú del malogro
mediante
la dialéctica del éxito y el fracaso” (9).
La colección presenta trabajos de importantes
hispanistas (con
predominio del área germana) y escritores españoles y
latinoamericanos que enmarcan sus estudios y comentarios siempre dentro
de
está dinámica de éxito/fracaso, con perspectivas
varias y en
áreas tan disímiles como la epistemología, el
choque de
culturas, la globalización, los movimientos vanguardistas o los
estudios
postcoloniales. Dada la variedad de aproximaciones al tema y la
diversidad de
contextos, el libro organiza las contribuciones en parejas en donde se
contraponen
muchas veces las configuraciones hispanoamericanas y peninsulares.
El texto se abre con una aproximación
panorámica de Ottmar
Ette dedicado a las distintas fases históricas del proyecto
globalizador
–comenzando desde Cristóbal Colón hasta el impacto de los
sucesos del 11 de septiembre de 2001- en el que destaca el espacio
privilegiado
de la literatura “desde el cual se podría abordar y tal vez en
parte eliminar el error, quizás central, en el sistema de
globalización: la falta de desarrollo de un saber con/vivir
transreal y transcultural”
(43). Siguiendo esta línea, la idea de fracaso de la
globalización será retomada por Dieter Igenschay en un
capítulo que toma como punto de partida El fin de
la locura de Jorge Volpi, y que le sirve como excusa para
analizar el fracaso de la dicotomía centro/periferia y de la
división entre discursos europeos y americanos.
Pere Joan i Tous, por su parte, tomando como eje textos de
Jorge
Semprún, estudia la poética de un fracaso doble: por un
lado, de una
literatura que intenta infructuosamente testimoniar sobre los horrores
de lo
ocurrido en los campos de concentración y exterminio con
narraciones
fragmentarias, que se pierden en “excursos y extemporaneidades”
(70) y una recepción que parece incapaz de asumir ese
testimonio. En
paralelo a esto, el estudio de Frank Estelmann parte de una escena de Campo francés de Max Aub para, al
compararla con otros textos de la serie de El
laberinto mágico –con sus descripciones sobre la Guerra
Civil
española, sus traiciones,
éxodos y exilio-, preguntarse si aquel episodio, ambientado en
un campo
de concentración francés, no encubre el fracaso de un
acto
artístico en donde el propio Aub ilustra su destino como autor.
La presentación de Ana Merino, mientras tanto, pone un
acento
original en las miradas que el cineasta español Luis
Buñuel, el
escritor peruano Julio Ramón Ribeyro y el pintor argentino
Antonio Berni
han plasmado sobre las tribulaciones de la niñez en sus obras,
enmarcadas en una “modernidad incómoda” que fracasa en su
proyecto social y que termina arrojándolos al arrabal de la
invisibilidad y el silencio. Dorian Occhiuzzi, en cambio, propone un
acercamiento a Ramón María del Valle-Inclán y sus Sonatas como espacio de abigarramiento,
de redundancia
adjetival, de apelación a lo cursi, que se contrapone al
silencio y la
invisibilidad que planteaba Merino en su capítulo y con sus
autores. Según
Occhiuzzi, Valle-Inclán fracasa en su intento por crear un
“idealizado
escenario aristocrático, al introducir elementos provenientes de
la
clase media y produce, por un lado un choque y, por el otro, un
distanciamiento
entre los dos mundos en cuestión” (104).
Irene Andrés-Suárez analiza los fracasos
expresivos y colapsos
comunicativos en la obra del escritor oscense Javier Tomeo; en tanto,
Vittoria
Borsò, con ejemplos de Vicente Huidobro y César Vallejo,
trabaja
cómo el imaginario poético de las vanguardias
latinoamericanas reelaboraron
el fracaso. En su texto, Borsò propone un mapa de la modernidad
del
siglo XX en donde cree percibir dos elaboraciones estéticas del
fracaso
(1) como tema y (2) como principio escritural, fenómenos que
podrían ser explicitados como “la salida del fracaso” y “el
fracaso de la salida (de las soluciones temáticas y formales)”
(121). Roland Spiller, por su parte, toma Los
detectives salvajes, del chileno Roberto Bolaño, como excusa
para
examinar el fracaso de las utopías de toda una generación
latinoamericana signada por acontecimientos violentos. Con un detallado
y
sobresaliente análisis de los materiales intertextuales y
polifónicos que constituyen la obra, Spiller pasa revista a un
proyecto
estético que, a su juicio, sirve como ejemplo de una nueva
literatura
transcultural latinoamericana que hace hablar a la multiplicidad,
atraviesa las
literaturas nacionales y presenta como motivo poético más
evidente “la pregunta por el mal en forma de la violencia que sigue
traumatizando la historia latinoamericana también en el comienzo
del
nuevo siglo” (170).
Janett Reinstädler analiza el fracaso de la memoria y la
comunicación en Llanto: novelas
imposibles, de la mexicana Carmen Boullosa, en donde se busca
establecer un
nexo entre la época de la conquista y la época actual;
Florian
Borchmeyer, siguiendo en esa línea, parte de su documental sobre
los
edificios derruidos de La Habana para hacer una revisión del
culto a las
ruinas. Memoria y olvido en Jorge Luis Borges serán los temas
del
capítulo de Adriana López Labourdette, mientras David
Freudenthal
apela a dos textos canónicos de Juan Carlos Onetti (Juntacadáveres
y El
astillero) para ver en ellos la dialéctica de la renuncia y
la
resistencia. Le sigue un capítulo de Sergio Chejfec en donde se
ejemplifica
con autores latinoamericanos del siglo XX las articulaciones
divergentes que
entrechocan en la idea de fracaso, entendido como “lugar de tensiones
ideológicas contenidas” (234). Finalmente, el libro se cierra
con un
artículo de Yvette Sánchez, que integra las Artes
Plásticas y visuales y toma en cuenta el carácter
creativo del
fracaso, y otro de Marta Álvarez sobre Ignacio Vidal-Folch.
Ambos textos
preparan el terreno para los cuatro cuentos de Ignacio Vidal-Folch que
se han
incluido en el final.
Poéticas del
fracaso es un estudio relevante
por diversas razones. En primer lugar, es uno
de los pocos trabajos que ofrece una aproximación general,
sólida
y erudita al estudio del fracaso como matriz mental
poético-cultural de nuestras
letras en distintos períodos del siglo pasado. En segundo lugar,
hace un
aporte significativo para entender la extensión del
fenómeno y
sus distintas prácticas. Por último, su virtud descansa
en la
variedad de perspectivas y áreas que cubre. En este sentido,
debemos
felicitar a los editores por semejante esfuerzo.
En suma, esta valiosa y original colección
de ensayos pone en evidencia el dinamismo del campo cultural
hispánico y
constituye no sólo un muy recomendable aporte para todos
aquellos
interesados por adentrarse en el estudio de las implicancias
poetológicas del fracaso, sino también una inestimable
contribución
al campo de nuestros estudios culturales.
Griffith University